Un cuento os voy a contar, pasó hace mucho tiempo, casi un año ya.
Vinieron
unas mamás y unos papás, incluso algún
abul@ a ver si podían dejar en nuestras manos algo muy querido, mejor dicho, lo
más querido.
Venían
con miedo, pensado que algo tan querido iba a estar en manos extrañas. Nada más
cruzaban la puerta pensaban que eran
malas mamás o malos papas, y que decir tiene de ser mal abuelilt@ ¿ cómo podían pensar por un solo momento en
dejar lo más querido en aquel lugar?.
Salían
convencidos, unos más otros menos, de que sería lo mejor que podían hacer, lo
hablaban en casa, pensaban en que si sería demasiado pronto en dejar algo tan querido y pequeño, fuera de su
hogar.
Pero
un día llego el momento, much@s lloraron porque para ell@s era muy duro
desprenderse de su más valioso tesoro. Poco a poco el tiempo pasó y el lloro se
volvió en alegría, amistad, abrazos, besitos….
Ahora
, somos nosotras las que lloramos porque ya nos van a dejar los pequeños tesoros, porque aquello tan
valioso que dejaron en nuestras manos sois vosotros chiquitin@s.
Algunos
vinisteis sin dientes, sin caminar…. Ahora ya debéis partir hacia otra etapa de
vuestra vida. Nunca os vamos a olvidar.
Gracias
por haber compartido momentos tan especiales con nosotras.
A
los que volvéis en Septiembre, os esperan más juegos y diversión.
Este
blog se despide hasta Septiembre.